Arde La Sangre | "Hijos del Dolor"

Arde La Sangre, la nueva banda del ex Carajo y A.N.I.M.A.L. Corvata Corvalán, lanza  EP "El comienzo"

Formada  a comienzos del año pasado, es una banda de metal y power rock argentina, que se caracteriza por sus canciones con melodías oscuras y letras profundas y directas.

Arde La Sangre, el nuevo proyecto de Hernán “Tery” Langer y Marcelo “Corvex” Corvalán - integrantes del histórico power trío argentino Carajo- junto a Luciano Farelli (Parte Planeta) y Nacho Benavides (Sentencia Previa), lanzo este viernes “El Comienzo", un EP en vivo de cuatro temas grabado el 29 de diciembre de 2020 en el estadio Malvinas Argentinas.


 

"El Comienzo" es el registro audiovisual compuesto por cuatro temas ("Hijos del Dolor", "Lástima", "Un día de Furia" y "Fuego del Cielo") que está disponible a partir de este viernes en todas las plataformas digitales.

Para segunda mitad de año, la banda prepara un primer disco que contemplará 10 canciones más (que se suman a las cuatro del flamante trabajo); se trata de un lanzamiento independiente editado por Numen Música.

Formado en plena pandemia y sin la posibilidad de presentarse de forma directa frente al público, Arde La Sangre aparece con un EP apropiadamente titulado El comienzo, que fue grabado con los músicos tocando en vivo sobre el escenario del Malvinas Argentinas. Pero el cuarteto ya está preparando de modo "tradicional" (en estudio) su primer álbum, que quizá contenga los cuatro temas del debut en nuevas versiones. Y Corvata, además, lleva adelante su proyecto Corvex, que tuvo mucho que ver con el inicio de ALS.

Arde La Sangre, que claramente suena a continuidad lógica de Carajo, también aporta las nuevas texturas que implican la suma de un guitarrista que también es tecladista. Ahora como cuarteto, Corvata y Tery parecen tener un colchón sobre el que intensificar su estilo. Así es que el grupo suena en la línea del rock pesado (hay furia punk y colores del metal alternativo) pero con lugar también el cambio de intensidades (chequear la espacialidad de "Lástima") y la exploración de estructuras complejas. A no desesperar: riffs y machaques metaleros hay de sobra.